Recomendaciones en el uso de su acoplado

Aquí encontrará información útil para un mejor aprovechamiento y conservación de su acoplado.

Realizar el engrase adecuado del aro y de las puntas de eje (donde posee el elemite).
Sellar las tapas de las puntas de eje para evitar posibles pérdidas.
No cargar la unidad por encima de su capacidad.
Controlar el nivel de aceite en los sistemas hidráulicos.
Hacer revisiones periódicas del chasis y puntos clave como las tuercas.
Verificar que todas las luces funcionen correctamente.

No engrasar en exceso las campanas para evitar que la grasa llegue a las cintas de freno.
Regular correctamente la intensidad de frenado para evitar el desgaste prematuro de las cubiertas.
Cada 10.000 km, o si se detecta baja eficiencia de frenado, ajustar manualmente las cintas.
Revisar que el cableado del freno esté en perfecto estado.
Utilizar preferentemente en modo «Inercial».

Drenar los tanques de aire diariamente antes de circular, usando la válvula ubicada debajo de cada uno.
Revisar los sellos de los grifos de aire periódicamente y reemplazarlos si presentan desgaste o roturas.
Verificar el estado de la válvula de emergencia. Si falla, repararla o reemplazarla.
Cambiar las cintas de freno cuando tengan menos de 7 mm de espesor en su punto más delgado.
Inspeccionar todas las ruedas periódicamente a través de los orificios de control para evitar dañar el tambor.

Controlar la presión al menos una vez por semana, siempre con los neumáticos fríos.
Rotar los neumáticos de forma periódica.
Balancear las cubiertas nuevas al momento de su colocación.
En llantas duales, colocar la cubierta más baja en la parte interna.
Inspeccionar regularmente y retirar objetos que puedan perforar los neumáticos.
Utilizar la presión de inflado adecuada según la carga.
No sobrecargar las cubiertas; usá siempre neumáticos acordes al peso a transportar.

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